Según un informe de la UNCTAD, el desplome del turismo internacional debido al impacto directo de la pandemia en el turismo y su efecto dominó en otros sectores estrechamente vinculados a ella, podría provocar una pérdida de más de 4 billones de dólares en el PIB mundial para los años 2020 y 2021.
El informe, presentado conjuntamente con la Organización Mundial del Turismo de la ONU, dice que el turismo internacional y sus sectores estrechamente vinculados sufrieron una pérdida estimada de 2,4 billones de dólares en 2020 debido a los impactos directos e indirectos de una fuerte caída en las llegadas de turistas internacionales y se cree que una pérdida similar puede ocurrir este año, debido a que la recuperación del sector turístico dependerá en gran medida de la adopción de las vacunas COVID-19 a nivel mundial.
Según los expertos, no se espera un regreso a los niveles de llegada de turistas internacionales anteriores al COVID-19 hasta 2023 o más tarde. Además, aseguran que las principales barreras son las restricciones de viaje, la lenta contención del virus, la baja confianza de los viajeros y un entorno económico deficiente.
A gran escala, el informe evalúa los efectos económicos del escenario proyectado por la OMT, que refleja una reducción del 75% en las llegadas de turistas internacionales, siendo este el pronóstico más pesimista; un escenario que refleja una reducción del 63% en las llegadas de turistas internacionales; y un tercer escenario, formulado por la UNCTAD, que considera tasas variables de turismo nacional y regional en 2021. Por último, según el informe, la reducción del turismo provoca un aumento del 5,5% en el desempleo de mano de obra no calificada en promedio.
